miércoles, 17 de abril de 2013

Capítulo 26







La lluvia caía sobre nosotros, pero nada importaba en ese momento. Todo mi cuerpo estaba en estado de alerta al tenerlo a escasos centímetros lejos de mí. Sus brazos rodeaban la parte baja de mi espalda, para evitar que yo cayera al suelo. Hace unos minutos que Harry me había agarrado para caer, pero no importaba nosotros seguíamos en la misma posición y nuestras miradas fijas en la del otro.

-Te hice una pregunta – volvió hablar, en ese momento volví a mi misma y me enderece rápidamente soltándome de sus brazos, lo mire nuevamente a los ojos y sus rulos estaban pegados en su frente y su ropa también estaba empapada. Pero sus ojos no sabía como interpretarlos, veía enojo, cariño, rabia, frustración, todo lo veía en sus ojos, así que simplemente oculte mi mirada de la suya - ¿No vas a decir nada?

-¿Qué quieres que te diga? – me decidí hablar finalmente

- Responde, ¿Hasta cuando ibas a seguir escondiéndote? – su voz cada vez era más ronca y hacia estremecer todo mi cuerpo.

- No se de que hablas Harry, yo no me estoy escondiendo – hable bajito, para luego tomar las llaves que habían vuelto a caer y darme media vuelta para empezar a caminar hacia la puerta de mi casa, iba en el primer escalón cuando Harry volvió hablar, gritar más bien.

- ¿Qué no te estás escondiendo? Y que estas haciendo en estos momentos, dímelo Gabriela, ¿De que te estas escondiendo o huyendo? – gritó, haciendo que yo me quedara petrificada en el lugar en el que estaba.

- De nada Harry – mentí, sin darme la vuelta por que si lo miraba a los ojos todo lo que había logrado en este mes se iría a la basura

- Mírame a los ojos y dímelo – pidió – Por que entonces no sé que es lo que hiciste tu, huir de un día para el otro sin dejar ningún rastro, pedirle a mis amigos que no dijeran nada de ti… dímelo Gabriela si eso no es esconderse entonces ¿Qué es? 

- Harry tu no entiendes nada – medio grite para que lograra escucharme a pesar de la lluvia que seguía mojándonos

- ¿Y que quieres que entienda? Que de un día para el otro desapareciste, que me dejaste un mural con todos nuestros recuerdos, que pediste que nadie dijera nada de ti… ¿Esa es tu forma de afrontar los problemas? ¿Huyendo de ellos? – cada una de sus palabras removía algo en mi mente, y un enojo estaba subiendo por todo mi cuerpo.

- ¿Y que querías que hiciera? – le grite al mismo tiempo que me giraba para verlo – Que me quedara viendo como tu seguías con tu vida feliz mientras que yo seguía estancada en el mismo lugar sufriendo por ti, querías que me quedara viéndote la cara todo los días sin poder acercarme a ti, sin poder abrazarte, ¡sin poder besarte!

- ¿Y quien te dijo a ti que yo pude seguir adelante? – habló esta vez más bajo, ahora una lluvia fina nos cubría – Tu crees que para mí fue fácil verte besándote con otro que no era yo, que de un día para el otro no te tenía a mi lado, no tenía tus abrazos, tus besos, tus risas, tus cariños… que de un día para el otro desapareciste de mi vida.

- Harry… - empecé a decir yo

- ¡NO! Gabriela, no fue fácil – siguió haciendo caso omiso de mí – Llore como un idiota los días que siguieron, no salía, no comía… pero claro tu solo viste las fotos en que yo salía sonriendo pero no haz escuchado eso de que tras una sonrisa se puede esconder mucho… Y luego verte en casa de Lou, y ver como mi corazón se agitaba a mil por hora al darse cuenta todo lo que te había extrañado, pero todo fue cubierto por el dolor Gabriela…. Porque jamás había querido alguien como te quería a ti, y sufrí como un imbécil… mientras que tú dejas eso en mi departamento, todo nuestros recuerdos, y luego desapareces como si nada – una mueca se apodero de sus labios y miro al cielo el cual seguía siendo testigo de esto junto con su lluvia.

-¿Cómo si nada? – Pregunte atónita bajando rápidamente los escalones y quedando a poca distancia de él - ¿Crees que para mi fue fácil todo lo que paso Harry? Que por una estupidez perdí a mi novio, a la única persona que me entendía como nadie, que me quería a pesar de saber todo mi pasado y que el no quería saber nada de mí, que al parecer estaba mejor sin mí ¿Crees que para mi fue fácil verte como si nada hubiera pasado? ¿Cómo si fuéramos dos desconocidos? – Solté un sollozo que desde el momento que lo había visto se había alojado en mi garganta – No podía soportarlo Harry, y no me quedaba otra opción que alejarme de ti, de desaparecer de tu vida así tu estarías mejor… 

- Pues no resulto tu plan – sus ojos estaban cubiertos por una tela cristalina, que hizo que mi corazón se encogiera – Por que no puedes desaparecer de mi vida, por que tú eres mi vida Gabriela y sin ti no soy el mismo, tu eres perfecta para mi

Sus palabras me dejaron sin aliento, Harry nunca me había dicho algo así. Yo simplemente pude mirar a sus ojos cristalinos y tal como había dicho antes, todo lo que había avanzado este mes se fue a la mierda. Mi corazón latía a mil por hora, y deje que el se apoderara de todo mi ser y sin pesarlo avance un paso que era el que me separaba de Harry y me apodere de sus labios. 

Al momento que junte mis labios con los de él una electricidad corrió por todo mi cuerpo volviéndolo a la vida que ya no estaba en él desde hace un mes. Los brazos de Harry me tomaron por la cintura y me elevaron del suelo, yo pase uno de mis brazos por detrás de su cuello mientras que con el otro acariciaba su fría mejilla. Sus labios se apoderaron completamente de los míos, como había extrañado estar de esta forma con él, sus labios, sus brazos rodeándome. Tome su labios inferior entre los míos y le di una suave mordida haciendo que ambos sonriéramos durante el beso, como extrañaba esa sensación de sentir a Harry sonriendo contra mis labios, de sentir su cariño a través de ese simple gesto.

-Perdóname por todo lo que paso – susurre contra sus labios al momento que nos separamos, y miraba de forma angustiada hacia sus ojos.

- Ya paso Gabriela - susurro mientras ponía un mechón de mi pelo mojado tras mi oreja – Todo lo que dijiste en esa carta y el mural me hizo entender que lo que paso con él simplemente fue un error, y que no significaba que no me querías. 

- No te quiero – musite, y sentí como su cuerpo se tensaba bajo su camisa mojada – Te amo Harry

- Yo también te amo Gabriela - sonrío mientras depositaba un besito en mi nariz – Casi me vuelvo loco sin saber de ti este mes… 

-¿Cómo te enteraste que estaba aquí? – pregunte sin pensarlo

- Zayn puede ser algo despistado con su móvil– soltó una pequeña risita 

- No entiendo – admití también soltando una pequeña risa

- Lo llame el hace dos días del celular de mi hermana, pero no contesto él precisamente el movil – sonrío haciendo que mis ojos se abrieran como plato, había sido él el que había llamado cuando yo conteste y nadie habló del otro lado – En un segundo supe que eras tú, así que llame a uno de nuestros agentes que maneja todos nuestros viajes y pregunte hacia dónde había viajado Zayn, y bueno aquí me tienes. 

- Así que técnicamente me eche al agua yo sola – solté una pequeña sonrisa

- Si mi amor, tu solita – susurró para apoderarse nuevamente de mis labios, ni cuenta nos habíamos dado que seguíamos bajo la lluvia hasta que sentimos el sonido de un rayo en el cielo, cosa que hizo que nos separáramos.

- Ven vamos a dentro – dije tomando su mano, pero el no avanzo - ¿Qué sucede?

- Tengo algo que es tuyo – dijo, soltando mi mano y llevo sus manos a su cuello, y luego con cuidado puso la cadenita alrededor de mi cuello. 

- La extrañe – susurre mientras tomaba el dije en forma de “H” entre mis manos. 

- Nunca debiste dejármela, es algo tuyo de nadie más – deposito un beso en mi frente – Oye 

- ¿Dime? – pregunte mirándolo a sus ojos verdes

- Feliz seis meses – una gran sonrisa de apodero de sus labios. Como olvidarlo hoy era nuestro cumple mes.

- Felices seis meses Harry – y me apodere de sus labios en un tierno beso.



-¡Zayn, Zayn! – lo movía suavemente el seguía durmiendo 

- ¿Qué pasa? – preguntó bastante adormilado

- Hay alguien que te busca abajo, y no tiene muy buen ánimo – le dije, el abrió los ojos algo confundido, yo ya me encontraba duchada y cambiada totalmente después de mi largo rato bajo la lluvia.

- Vamos – me hizo un gesto con la cabeza, luego que se había puesto un pantalón de chándal y una camiseta blanca, salí tras de él y bajamos hasta la sala de estar - Gabriela aquí no hay nadie…

- Date la vuelta – le pedí, a lo que me hizo caso y cuando se la dio quedo de piedra.

- Hola Zayn – habló Harry con su voz ronca

- Ha…Harry – vi como mi amigo tragaba saliva - ¿Qué haces aquí?

- Descubriendo tu mentira – hablo serio mientras yo me ponía a un lado de Zayn y agachaba mi mirada - ¿Así que supiste todos este tiempo dónde estaba ella y no fuiste capaz de decirme?

- No podía Harry, ella me lo pidió – se podía sentir el pánico en la voz de mi amigo, yo de a poco me fui moviendo hasta quedar a unos metros de Harry.

- Eres un gran amigo Zayn – dijo Harry con una sonrisa

- Yo lo siento Harry, pero ella es mi mejor amiga y no podía… Espera ¿Qué? – preguntó sorprendido mirando a Harry que tenía una gran sonrisa en su rostro

- Que eres un gran amigo Zayn – volvió a repetir Harry, mientras tomaba una de mis manos y me acercaba a él – La cuidaste durante todo este tiempo, mientras yo no estuve con ella y a pesar de que sabías dónde estaba, no me lo dijiste, pero aún así me ayudaste cada vez que estaba mal, al igual que los demás chicos, te debo una grande hermano.

- Espera, Espera, Espera – nos miraba con los ojos bien abiertos - ¿De que me perdí?

- Con Harry arreglamos las cosas Zayn – conté feliz

- ¿Enserio? – una gran sonrisa se apodero de los labios de mi amigo - ¡Por fin! No saben cuanto me alegro chicos

Fue hacia dónde estábamos nosotros y nos dio un fuerte abrazo, el cual con Harry contestamos obviamente, Zayn más que todo había sido testigo de todo lo que habíamos sufridos ambos, y de alguna forma tuvo la culpa de que Harry volviera a encontrarme.


-¿Y como supiste dónde estaba Gabriela? – pregunto Zayn cuando nos encontrábamos cenando los tres juntos. 

- Por tu culpa – respondió Harry mientras se llevaba el pedazo de carne a la boca y Zayn a mi lado se atoraba haciendo reír.

- ¿Por mi culpa? – pregunto mirándome preocupado 

- No pasa nada Zayn – tome su mano – Recuerdas el otro día cuando te dije que un numero raro había llamado a tu celular y que yo conteste y nadie habló

- Si, lo recuerdo – dijo mientras fruncia el ceño

- Pues era yo, desde el celular de mi hermana que al parecer no tienes guardado – habló esta vez Harry riendo

- Claro, es algo normal tener el celular de tu hermana entre mis contactos – dijo irónicamente Zayn – Aunque no estaría malo que me des el de tu madre

- ¡Zayn! – exclame yo riendo mientras que Harry le lanzaba un pan a Zayn, ninguno de los tres podía parar de reír, los chicos tenían una extraña obsesión con mi suegra.

- Son bromas – dijo sin dejar de reír, al igual que yo y Harry. 

Paso una nueva semana y Zayn se había decidido quedarse una semana conmigo al igual que Harry, y esa semana definitivamente había sido excelente además que pasado unos días había llegado Perrie hacernos compañía y todo había sido fantástico, y pues ya los chicos se habían enterado que Harry yo habíamos vuelto y estaban muy felices, todos nos dijeron que ya era hora. Y tras largas conversaciones con Harry había decidido volver a Londres junto con él y mi hermano, que también había influido en mi decisión, pero al final era lo mejor no soportaba estar más tiempo lejos de él y tampoco soportaría estar lejos de Harry. 

________________________________________________________________________

PEERDONN POR LA TARDANZA! Mi hermana se a ido de crucero y se a llevado el ordenador y ahii tenia los capitulos y no los e podido subir por eso , espero que  os guste quedan 4 capitulos y se acaba pasaros por mi otra novela ------>http://neverletanyonewin.blogspot.com.es